En el marco del Día Internacional de la Dislexia, celebrado cada 8 de octubre, el Centro de Día de Miguelturra se tiñó de turquesa en una emotiva muestra de apoyo al colectivo de personas con dislexia. Esta iniciativa forma parte de la campaña global “Unidos por la Dislexia”, coordinada por DISFAM y el Observatorio Internacional de Dislexia y otras Dificultades Específicas de Aprendizaje (OIDEA).

El gesto simbólico de iluminar edificios parece simple, pero tiene un profundo significado: dar visibilidad a un trastorno que, mayormente, permanece oculto. La dislexia, que afecta a más del 10 por ciento de la población mundial, a menudo se detecta tarde debido a su naturaleza poco visible.

En los últimos años, la iluminación en turquesa de estructuras emblemáticas se ha convertido en un emblema de esta campaña, logrando un impacto global con miles de puntos de luz en todo el planeta. Con este acto, el Ayuntamiento de Miguelturra no solo muestra solidaridad con las personas afectadas por dislexia, sino que también busca impulsar una mayor conciencia social sobre las necesidades educativas, emocionales y sociales que acompañan a este trastorno.

La acción se alinea con un movimiento internacional que persigue no solo visibilizar la dislexia, sino también fomentar la comprensión y el apoyo a quienes lidian con sus desafíos diariamente. Con cada edificio iluminado, se espera que aumente el entendimiento y la empatía hacia un sector significativo de la población que, a menudo, enfrenta sus luchas en silencio.

Nota del Ayuntamiento de Miguelturra.